Chica Cuántica

Astrología vs Coaching

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Lo primero que me mostró la astrología fue en lo que el coaching se quedó corto, y fue amor propio, con mis luces y con mis sombras que bien claras me las iluminó mi proceso de aprendizaje con el coaching y es por eso que me parece importante compartir mi experiencia en carne propia de las diferencias entre estas dos.

Empecé por el coaching, en su momento no me hubiera imaginado siquiera lo que resultaría o a donde me llevaría esa experiencia, porque en ese entonces lo busqué porque necesitaba ayuda, incluir nuevas herramientas y conocimiento para mi rol de directora en Urabá, luego de que mi resultado de clima laboral arrojara una verdad que me costó aceptar pero que era evidente mi conexión a nivel mental y profesional pero distante mi conexión emocional y vincular con la mayoría de mi equipo de trabajo. Wow! ¿Saben que me costó aún más?, que no quería que fuera diferente y eso solo cambió cuando en el módulo de juicios y creencias le dí una mirada a esos dichos, frases que tenía anclados a mi equipo y después de varios minutos en el ejercicio resalté una que decía: “Con cara o sello, ellos siempre dirán que fue tu culpa” no resulta una frase muy vinculante, no crees?
¿Que tipo de oportunidades se abren con esta frase? ¿Qué oportunidades se cierran?
¿Qué clase de relación construyes? ¿Con qué características?

El poder de lo que pensamos, nos decimos y repetimos. Y para bien o para mal, todo lo anterior termina siendo la manera en la que vivimos y construimos.

Esta frase la adopté de una jefe que tuve y que me enseñó cosas increíbles que en definitiva me llevaron al éxito, y que estoy segura cuando me decía esta frase solo intentaba protegerme, solo que yo me terminé cerrando, levantando un muro entre ellos y yo. Traté de igual manera proteger a mi equipo más cercano replicando esta frase; a ambos equipos: mis mas sinceras disculpas.

Eso me enseñó el coaching, me mostró mis más y mis menos, desde mi ser profesional, el coaching me enseñó mucho de mi relación con los otros y como a través de diversas técnicas puedo lograr objetivos alineando mi lenguaje, mi emoción y mi cuerpo… uf! La del cuerpo! Es una anécdota que tendré en cuenta para compartírselas en otro momento.

Pero no fue sino hasta que llegó la astrología que entendí porque era como era, sin que estuviera mal, sin que hubiera una manera correcta de ser, no solo entendiendo, sino amando lo que soy, amando todas esas luces y todas esas sombras porque la astrología me mostró que en eso consiste la integración, en la conexión de los opuestos y que lo que no amo, no lo integro, aunque lo acepte.

Así que resumiría de forma ambiciosa la gran diferencia entre ambas frente a lo que aportaron a mi vida así:

El coaching me mostró el cómo lograr objetivos a través de la aceptación tanto de mí como del otro, siendo congruente con mi cuerpo, lenguaje y emoción desde el observador que soy.

La astrología me mostró todo de mí, me invitó a amarme desde lo más íntimo hasta la esfera más externa y desde ahí ser con otros, integrando lo que se me dificulta, potenciando en lo que brillo y amando mi manera, porque contra todo pronóstico, fue la astrología quien me ratificó, que soy ÚNICA!

He ahí el como llegué a querer sumarlas, integrarlas y lograr que mis consultantes tuvieran la suma de estas experiencias en ellos, reconociendo su unicidad, amando lo que son mientras cumplen sus objetivos y sueños.

Autora:
Juliana Berrio 

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